miércoles, 9 de mayo de 2007

Posdata

La aventura de Yomero tuvo un final feliz. Regresaron a sus casas sanos y salvos; aunque habían pasado momentos difíciles, todo termino bien.
Con la llegada del siguiente día, salieron a la luz algunos detalles. Yomero se había arrancado algunos fragmentos de uña al tratar de subir por el tobogán. Tenía moretones en los brazos, marcas de las manos del Toka al tratar de aferrarse a él. Raspaduras y moretones en codos, rodillas y tobillos.
Los demás compañeros de aventura tampoco lo pasaron muy bien que digamos. En el trayecto de regreso, se perdieron, y tardaron mucho tiempo en volver a encontrar el camino. Como habían tirado la comida, tuvieron que comer tréboles y algunas moras silvestres. La Gansa sufrió otro accidente: tenía mucho rato que necesitaba excretar algunas heces, y como no quiso ir al baño 'entre las hierbas', su esfínter no soportó y liberó su carga. Además, el resto del camino lo tuvieron que remolcar, porque el cansancio lo venció. Lloró sin parar hasta llegar a su casa [otra vez perdóname Gansita, pero lo que sabe Dios...].
Pero bueno, lo importante es que aprendieron la lección... ¿O no?

3 comentarios:

giunik dijo...

Wow, que fina expresion: "necesitaba excretar algunas heces" para decir "queria cagar" y la de "su esfínter no soportó y liberó su carga" es como decir "se cago" jejejeje sorry pero no lo pude evitar, muy buenas historias

Anónimo dijo...

No cabe duda que con las aventuras de Yomero aprendemos muchas lecciones además son muy divertidas, ya espero la siguiente temporada de Yomero, a ver si puedes poner un trailer o unos previews de la siguiente aventura no Tikoh ??, saludos ...

Isaac dijo...

oye si, en you tube cuelgalas y seguro tendra buen pagerank